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«LA EVOLUCION DE LA EMPRESA DE ARMAMENTO
Prevé una decisión «inminente» del Consejo de Ministros sobre un pedido de 75 millones de euros
General Dynamics plantea que las 2 fábricas de Asturias produzcan también para el extranjero
19/05/2005 06:10 / J.M.H.
Arango y Sullivan, con los certificados de calidad.
(FOTO:FERNANDO ROBLES)
La dirección la empresa de armamento Santa Bárbara Sistemas, propiedad de la multinacional norteamericana General Dynamics, considera «inminente» la adjudicación de un contrato para fabricar 71 obuses 155/52. La compañía confía en que el Consejo de Ministros dé luz verde al pedido, que se realizaría en su totalidad en la fábrica de armas de Trubia, en breves fechas. Incluso no se descarta que el Gobierno pudiese tomar la decisión este viernes, aunque nadie se atreve a confirmar la fecha.
Es el último trámite que resta para que la planta de Trubia comience la fabricación de estos obuses, una vez alcanzado hace ya unas fechas el acuerdo con el ministerio de Defensa para el suministro de este material bélico. El pedido que espera la factoría asturiana supondría un desembolso de unos 75 millones de euros al Ejército español.
La planta asturiana ya fabricó 12 obuses de estas características para Defensa. Se trata de los obuses con más avanzada tecnología de los de sus características. Con una capacidad de 10 disparos por minuto, su alcance es de 40 kilómetros.
Además del obús 155/52, la sociedad Santa Bárbara Sistemas tiene previsto cerrar un contrato este año para la fabricación de misiles para la Marina y el Ejército. Junto a estos contratos para el Ejército, que concentran la mayor parte de la actividad industrial de la empresa, el consejero delegado de General Dynamics, Patrick Sullivan, anunció ayer en Trubia que una de las «iniciativas claves» que maneja la multinacional para crecer en el negocio es «entrar en mercados fuera de España porque reduciría el precio de nuestros productos». Esta estrategia afectaría a las ocho plantas de producción en España, entre ellas la de Oviedo y Trubia.
Investigación y desarrollo a largo plazo, una evaluación «minuciosa» de las líneas de productos, mejora de la competitividad en base a «examinar los elementos de coste» y cambiar la cultura de una empresa pública, que se privatizó hace cuatro años, fueron otros de los objetivos del plan estratégico que expuso Sullivan.
El directivo de la multinacional y el presidente de Santa Bárbara, Antonio Oyarzábal, se mostraron optimistas sobre el futuro de la compañía que el año pasado, por vez primera, dio beneficios. Ayer en Trubia, ante los trabajadores de la fábrica, representantes sindicales, militares y directivos de la empresa, consideraron la entrega de dos certificaciones en materia medioambiental y de seguridad laboral como un nuevo avance de la empresa.»
Antigua Empresa Nacional Santa Bárbara 