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«Los trabajadores marcharon desde la factoría al Ayuntamiento de Siero donde fueron recibidos por las autoridades municipales
04.03.14 – 14:22 – EFE | OVIEDO
La plantilla de la planta de Coca-Cola en Colloto, acompañada de trabajadores de otras empresas afectadas por cierres o reestructuraciones, han realizado hoy una marcha desde las instalaciones de la embotelladora hasta el Ayuntamiento de Pola de Siero en protesta por los planes de la empresa de cerrar la factoría.
La marcha, en la que participaron varios cientos de personas, comenzó a las 9.30 horas y llegó al mediodía a Pola de Siero, donde los representantes de los trabajadores fueron recibidos por los grupos municipales en el Ayuntamiento. Entre los participantes en la marcha había trabajadores de otras empresas afectadas por cierres, reestructuraciones o ajustes, entre ellas Tenneco, Sedes, Benito Sistemas, General Dynamics o Liberbank, además de representantes de organizaciones sindicales.
La plantilla de la planta asturiana, compuesta por 144 trabajadores que están en huelga indefinida desde el pasado 17 de febrero, tiene previsto mantener las protestas en contra del expediente de regulación de empleo presentado por el embotellador único de la multinacional, Coca-Cola Iberian Partners, que incluye el cierre de las factorías de Colloto, Fuenlabrada, Alicante y Palma de Mallorca.
La compañía anunció el pasado jueves un plan de adhesión voluntario abierto a 2.300 trabajadores (los de todos los centros afectados) para que puedan decidir, durante un periodo de 15 días, si se acogen a las medidas de prejubilación, recolocación o bajas incentivadas, aunque insistió en que su decisión de cerrar cuatro de sus once plantas es «firme».
El portavoz del comité de Empresa, Israel García, ha insistido en que la intención de la empresa es «dividir» a la plantilla con el ofrecimiento de estas medidas a nivel individual y ha rechazado cualquier medida que pase por el cierre de la planta de Colloto.
Esta marcha coincide con un anuncio realizado por Coca-Cola España y en el que ha lamentado que su «respetuoso silencio» durante el periodo de negociación entre los sindicatos y la embotelladora Coca-Cola Iberian Partners (CCIP) para acometer su plan de ajuste no haya contribuido «a facilitar el entedimiento real de lo que estaba sucediendo».»
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