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«sábado, 9 de mayo de 2015
Trubia, asignatura pendiente
. Garci consiguió oscar por «Volver a empezar» pero lo merecía también con otras varias. En dos tuve el honor de intervenir como figurante. Igual lo hice con Vicente Aranda en la Fábrica de Trubia. Trubia sí que es, como el renombrado título de Garci,» asignatura pendiente» de nuestro Concejo. Y aún de nuestra España, entregada en la compra de su armamento a una empresa americana que engañó vilmente al Ayuntamiento, y no sé si a la región, con el cierre de La Vega, 55 imperdonables despidos y la inutilización de maquinaria e histórico «know how». En la calle, el pueblo se ha manifestado e incluso algún sindicato y el propio Ayuntamiento, falto sin embargo de contundencia, están arrepentidos de su otrora complicidad para la descarada burla americana. La espiral de armamento de un mundo enloquecido mantiene Trubia en pie, pero incapaces todavía sus gestores de afrontar responsabilidades sociales que buscan en nueva sentencia del Supremo la torpe absolución de sus vergonzosas demasías. El entuerto trubieco no es solo ya de Trubia sino de Asturias y apunto que Europa se sentirá, más pronto que tarde, concernida, pues resulta intolerable la alternativa canadiense que preparan los ingenieros de Ontario de la misma General Dynamics. En todo caso, que de Trubia no pueda nadie tomar el verso de Cernuda: ¡donde habite el olvido! La resistencia trubieca se merece un «Oscar».